Corría el año de 1.989 y en el seno de uno de los grupos fundadores de la renovación de las fiestas se constituye el Grupo Femenino Templario. Eran los últimos meses del año cuando un grupo de jóvenes ilusionadas deciden participar activamente en nuestras fiestas. Se dirigen al entonces Gran Maestre de la Soberana Orden del Temple, D. Juan José Avilés de Torres, y solicitan autorización para formar un subgrupo dentro del grupo que este presidía.
Aquellas veintidós fundadores inician su andadura en la que ya desde el primer momento cuentan con el apoyo y colaboración, tanto del grupo Templario en general como de D. Gonzalo López-Auguy Torres en particular.
Organizan una serie de actividades –desfiles de moda, sorteo de motocicleta, reina por un día...- con la intención de financiar una ilusión y no escatimar en esfuerzos; había que poner los puntos necesarios para confeccionar un traje y contratar una banda de música.
Llega el momento de esa primera salida y una chispa de aire fresco salpica ese desfile de Mayo de 1.990, ese primer desfile incluso obtuvo un premio de Comisión de Festejos que recompensó sus esfuerzos y estimuló a otras jóvenes caravaqueñas a integrarse en el recién nacido subgrupo.
Desde un primer momento se integraron en la Soberana Orden del Temple y en sus actividades, los Templarios reconocen su esfuerzo y resultado del mismo
En 1992 el Grupo Femenino Templario, diseña un nuevo traje: escapulario con mallas y la cruz templaria bordada en el pecho.
Fue en el año 1995 cuando se produjeron grandes cambios: los antiguos diseños de guerreras se sustituyen por atuendos de damas medievales y el desfile ordinario por la danza. El resultado fue espectacular, seduciendo en todo momento a los espectadores del desfile. A ello hay que añadir un elemento importantísimo: su iniciativa hace evolucionar la fiesta, pues, hasta entonces se contrataban ballets de otras poblaciones. Desde entonces la mujer ha adquirido un gran protagonismo en nuestro festejo.
Han pasado los años, y las Templarios constituyen uno de los grupos más numerosos y sólidos de nuestra fiesta. Desde aquella primera salida sus componentes se han multiplicado por cuatro, siendo en la actualidad noventa componentes.
El Grupo Femenino Templario cuenta con tres trajes de damas medievales de diferentes estilos, destacando el traje heráldico, siempre en consonancia con la Soberana Orden del Temple. Acompañando a estos trajes se llevan diferentes complementos -pañuelo, arco de flores, y varita con cascabeles- haciendo la danza más elegante a su paso por las calles de Caravaca.
También las Templarias han dado al festejo diversas reinas Cristianas: Anastasia Martí, Solaina Navarro, Beatriz García-Esteller, y la actual Reina, Alicia García-Serrano Arroyo. Igualmente, de sus filas han salido dos Infantas de Castilla: María Avilés y Encarnita San Nicolás.
Con gran devoción a la Santísima y Vera Cruz, y con la mirada puesta en el futuro, las Damas Templarias siguen creciente en ilusión y esperan continuar en el festejo.
Aquellas veintidós fundadores inician su andadura en la que ya desde el primer momento cuentan con el apoyo y colaboración, tanto del grupo Templario en general como de D. Gonzalo López-Auguy Torres en particular.
Organizan una serie de actividades –desfiles de moda, sorteo de motocicleta, reina por un día...- con la intención de financiar una ilusión y no escatimar en esfuerzos; había que poner los puntos necesarios para confeccionar un traje y contratar una banda de música.
Llega el momento de esa primera salida y una chispa de aire fresco salpica ese desfile de Mayo de 1.990, ese primer desfile incluso obtuvo un premio de Comisión de Festejos que recompensó sus esfuerzos y estimuló a otras jóvenes caravaqueñas a integrarse en el recién nacido subgrupo.
Desde un primer momento se integraron en la Soberana Orden del Temple y en sus actividades, los Templarios reconocen su esfuerzo y resultado del mismo
En 1992 el Grupo Femenino Templario, diseña un nuevo traje: escapulario con mallas y la cruz templaria bordada en el pecho.
Fue en el año 1995 cuando se produjeron grandes cambios: los antiguos diseños de guerreras se sustituyen por atuendos de damas medievales y el desfile ordinario por la danza. El resultado fue espectacular, seduciendo en todo momento a los espectadores del desfile. A ello hay que añadir un elemento importantísimo: su iniciativa hace evolucionar la fiesta, pues, hasta entonces se contrataban ballets de otras poblaciones. Desde entonces la mujer ha adquirido un gran protagonismo en nuestro festejo.
Han pasado los años, y las Templarios constituyen uno de los grupos más numerosos y sólidos de nuestra fiesta. Desde aquella primera salida sus componentes se han multiplicado por cuatro, siendo en la actualidad noventa componentes.
El Grupo Femenino Templario cuenta con tres trajes de damas medievales de diferentes estilos, destacando el traje heráldico, siempre en consonancia con la Soberana Orden del Temple. Acompañando a estos trajes se llevan diferentes complementos -pañuelo, arco de flores, y varita con cascabeles- haciendo la danza más elegante a su paso por las calles de Caravaca.
También las Templarias han dado al festejo diversas reinas Cristianas: Anastasia Martí, Solaina Navarro, Beatriz García-Esteller, y la actual Reina, Alicia García-Serrano Arroyo. Igualmente, de sus filas han salido dos Infantas de Castilla: María Avilés y Encarnita San Nicolás.
Con gran devoción a la Santísima y Vera Cruz, y con la mirada puesta en el futuro, las Damas Templarias siguen creciente en ilusión y esperan continuar en el festejo.